Estas deliciosas naranjas confitadas son muy fáciles de hacer y a todos nos encantan; son perfectas para cualquier ocasión en que queramos algo dulce o hacer un regalo casero.
Lavamos muy bien la naranja con agua para quitar cualquier resto de suciedad o cera que pudiera tener y la secamos.
Cortamos la naranja en rebajas, lo más finas posibles, de aproximadamente 5 milimetros. Descartamos los bordes y reservamos.
En una olla ancha (podría ser también un sartén grande) ponemos el agua y el azúcar, Calentamos a a fuego fuerte hasta que el azúcar se disuelva.
Bajamos el fuego al mínimo y colocamos las rebanadas de naranja en el almíbar, teniendo cuidado de que no queden unas encima de las otras.
Cocinamos durante 15 minutos. Y con cuidado volteamos las rebanadas de naranja de a una.
Cocinamos a fuego suave durante 20 minutos más.
Sacamos las rebanadas de naranja y las dejamos estilar sobre una rejilla o papel mantequilla durante al menos 1 hora ( puede ser de un día para otro)
Ponemos el chocolate en un bowl y lo derretimos a baño María teniendo cuidado de que el agua caliente (no hirviendo) no toque el bowl con chocolate directamente.
Pasamos las naranjas confitadas por el chocolate, las colocamos en un papel mantequilla hasta que el chocolate se solidifique (pueden guardarlas en el refrigerador) y ¡A disfrutar!